martes, 6 de diciembre de 2011

HEY, WASSSAP

  Hola, quiero irme a vivir sola.  Siempre quise ser independiente, te juro. No viene de ahora esto. Veía a Lisa y a Ivonne (que cumple años el mismo día que yo!) de Bandana viviendo cada una en su casa ahí tocando la guitarra entre las velas, y yo decía PUTA, quiero irme a vivir sola -y también quería aprender a tocar la guitarra, pero Rubén me cagó el sueño, otra historia aparte-.
  A ver... Bandana lanzó su disco más o menos en el 2001 y actualmente estamos en Diciembre del 2011, casi 2012 (que miedo, wacho!). Según mis cálculos eso fue hace 11 años aproximadamente. Y hace 11 años yo tenía 4 años. Lo que implica que desde los 4 años quiero irme a la mierda y no puedo.
 ENCIMA esas ganas de irme a la mierda se hicieron más intensas a medida que fui creciendo con la llegada de 2 pequeños intrusos a los que se los suele llamar "hermanos". Los re banco igual, bros, uno se encariña, vió?.
 Bueno, así que un día me cansé de la dependencia, agarré mi monopatín y me fui al carajo. Eso pasó mas o menos cuando tenía 5, 6 años, en ese momento "irse al carajo" para mi era dar una vuelta a la manzana sin avisarle a nadie. Cuando volví estaban todos buscándome desesperadamente.
 Si esa era mi situación de kindergardiana, imagínense cómo estoy ahora. Quiero irme al carajo, y el carajo no es más una vuelta a la manzana ahora. Quiero irme al carajo y si tuviera la oportunidad no me mudaría, como otra gente bastante patética, en frente de la casa de mi madre. Quiero irme al carajo y estoy segura que a los 40 NIEMPÉDO sigo viviendo acá. Quiero irme al carajo, y cuándo yo digo que quiero irme al carajo es al carajo, CARAJO!.
 Quiero despertarme tranquila en mi casa sin ningún pendejo al cual tenga que esquivar por estar en el medio estorbando mi camino, quiero que todo esté silencioso, que sólo se escuche lo que yo quiera escuchar, quiero cocinarme para mí sola, quiero tener un trabajo, juntar mi platita y gastarla en lo que se me plasca.
  Y cada vez deseo eso más. Hoy me desperté, bajé rumbo a la cocina, y lo primero que escuché fue un:
-Mayra, andá a vestirte.
  Viste cuándo decís: QUÉ MACANUDA QUE ES LA GENTE! Bueno, vayanse a la mierda. Ni buen día, nada. Y eso que no me veían desde hacía 2 días, porque me la había pasado durmiendo día y noche. Hasta tenía acalambrados los pieses.
  Todos esos disgustos me los ahorraría si viviera sola, sería la gloria. Gloria, faltas en el aire, falta tu presencia, cálida inocencia.

Miren, ahí estoy yo viviendo en mi departamento:

Las cositas amarillas son las velas, pero lo de la guitarra no lo pude concretar por culpa de Rubén. En vez de joder a mis vecinos con una guitarra como las de Lisa e Ivonne voy a joderlos con mi armónica. 

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